Con el supuesto objetivo de defender la Constitución Nacional, ellos hacen un llamado a la violencia entre paraguayos, en forma constante, en complicidad con la mafia de los medios de comunicación, cuyos dueños perdieron los privilegios económicos para sus empresas, lo que los llevó a realizar una alianza con quienes meses atrás llamaban impresentables.
El objetivo, es enturbiar el rumbo de progreso que el país va tomando gracias al Gobierno de Horacio Cartes y crear un clima de inestabilidad, anunciando con ello un posible juicio político al Jefe de Estado, sin razón alguna.
Prueba de este discurso violento fueron justamente los mensajes de WhatsApp de un grupo de senadores de la oposición, en los que hablaban de un supuesto plan de atentar contra el Presidente de la República para que el Titular del Senado termine ocupando su lugar hasta el 2018.
Tras la filtración de mensajes, los legisladores involucrados en las conversaciones no supieron explicar el tema y mientras unos negaron la existencia del chat, otros admitían la conversación revelada. Esta intención de separar, de cualquier manera al jefe de Estado del poder, se genera frente al planteamiento propuesto desde el oficialismo de que la “Gente Decida”, como soberano que es, sobre la reelección presidencial mediante la Enmienda de la Carta Magna.
Pese a todo, Paraguay sigue creciendo, a pesar de las dificultades, por sobre el promedio latinoamericano.
Asimismo, es importante destacar que nuestro país logró el récord de obras públicas con la ampliación del tramo de la Ruta 3 de Mariano Roque Alonso y Limpio, el asfalto sobre empedrado de la Ruta Departamental en Isla Umbú-Pilar, el Acueducto del Chaco Central, la renovación del Parque Automotor, la duplicación de la Ruta VII, la circunvalación de la ciudad de Carapeguá, la restauración del puerto de Asunción, futura sede de Ministerios, el paso a desnivel sobre la Avenida Aviadores del Chaco, entre otras muchas obras del Gobierno actual, que avanza pese a las presiones de los medios de comunicación.